Terminator, repasamos una de las grandes sagas de la ciencia ficción

En el año 1984, un joven y ambicioso guionista llamado James Cameron presentó su primera película como directo. Se trataba de un filme de acción y ciencia ficción en el que una inteligencia artificial libraba una guerra a muerte contra la Humanidad, al entender que tenía que deshacerse de ella. Los humanos, sin embargo, salimos mucho más aguerridos de los que Skynet esperaba, y comandados por John Connor, presentamos batalla a esas máquinas que se habían vuelto contra nosotros. Había nacido la saga Terminator, con un espectacular Arnodl Schwarzenegger como protagonista en el papel del primer Terminator, T-800, una increíble máquina de matar que quiere deshacerse de Sarah Connor, futura madre del jefe de la Resistencia humana.

Terminator marcó un hito en su momento, porque supuso una de las primeras películas de acción y ciencia ficción que utilizaba algunos efectos especiales, marca de la casa del propio Cameron, que había trabajo como técnico de este tipo de efectos anteriormente. El guion, basado en una historia anterior, también funcionaba perfectamente, y las actuaciones de los protagonistas llevaron a la película a convertirse en todo un hito, un filme de culto que hoy en día es un clásico del cine de los 80. La saga ha continuado hasta hoy, con más pena que gloria en sus secuelas, eso sí, estrenándose su por ahora último capítulo en este 2019 sin que haya tenido una gran acogida por parte del público. Conozcamos más sobre Terminator, su historia y cómo ha llegado a convertirse en la saga que es hoy en día.

Cómo surgió Terminator

James Cameron había dirigido ya una película anterior, aunque sin mucho peso, cuando decidió llevar a cabo un guión que, como tendría que reconocer años más tarde, estaba basado en varios relatos de Harlan Ellison, un popular escritor de ciencia ficción. A través de esas ideas creó la historia de Skynet, la inteligencia artificial que se enfrenta a la humanidad con la intención de exterminarla. También ayudó a crear el aspecto del ciborg T-800, basándose en algunas pesadillas que había tenido estando enfermo. Para los efectos especiales contrató a Stan Winston, que ya estaba destacando muchísimo en la materia y que sería clave para darle el toque especial que el filme necesitaba. Con un presupuesto de apenas 6  millones de dólares, Cameron creo una película que marcaría una época.

La primera película

Estrenada en el mágico año 1984, para muchos el mejor dentro de la industria del cine por la gran cantidad de películas icónicas lanzadas durante ese año, Terminator nos mostraba una historia futurista, con toques de ciencia ficción, guerras contra máquinas y viajes en el tiempo, pero siempre con muchísima acción, marca de la casa del propio Cameron. El ciborg T-800 fue interpretado por Arnold Scharwzenegger, que ese dos años antes estrenaría Conan, convirtiéndose así casi de la noche a la mañana en una auténtica estrella en Hollywood. La actuación del actor austríaco, junto a la de Linda Hamiton como Sarah Connor, consiguió dotar a la película de mayor realismo y de una intensidad encomiable, convirtiéndose en todo un éxito.

Terminator 2, un hito en el mundo de los efectos especiales

Aunque no eran muchos los que creían en el proyecto de Cameron, al ver el resultado y el tremendo éxito que había obtenido el director canadiense, las puertas de una franquicia se abrieron para Terminator. Sin embargo, la secuela no llegaría hasta 1991, siete años más tarde de la original. En Terminator 2 nos encontramos de nuevo con Sarah Connor, ahora acompañada de su hijo John, y por supuesto, por el T-800. La película es una cinta espectacular de acción con momentos icónicos, pero será siempre recordada por ser un punto de inflexión en el mundo de los efectos especiales, sobre todo los digitales y por ordenador, siendo una de las primeras películas en hacer uso de ellos, poco antes de que Spielberg maravillara al mundo con sus dinosaurios en Parque Jurásico.

Secuelas de Terminator

El resultado en taquilla de Terminator 2 no fue el esperado, y la franquicia se quedó en barbecho al menos durante doce años más. En 2003 llegaría Termiator 3: la Rebelión de las Máquinas, que nos presentaría a un nuevo ciborg, T-X, esta vez con forma de mujer. La cuarta entrega, Terminator Salvation, se estrenaría solo seis años después, en 2009, con Christian Bale ya maduro en el papel de John Connor. Le siguió Terminator Génesis en 2015, como quinta entrega de la saga, que tampoco consiguió despegar demasiado bien en taquilla. Por último, el regreso de Edward Furlong y Linda Hamilton, los míticos John y Sarah Connor de la segunda parte, ilusionaron a los fans de cara a Terminator: Destino Oscuro, estrenada en este 2019. Las expectativas, sin embargo, parecen no haber sido cumplidas.

Terminator 6

Y es que esta última película de la saga, al menos por ahora, presenta a actores que aparecieron en el pasado en la saga, incluyendo al omnipresente Schwarzenneger, por supuesto, pero la historia se centra en una joven llamada Dani y su familia, a quien T-800 y Sarah Connor, junto a su hijo John, deciden proteger. Aunque había mucha expectación generada con el estreno, la mayoría de fans tienden a pensar que la saga está ya agotada y que más allá de las dos primeras películas, las demás secuelas eran bastante prescindibles, incluyendo esta última. Los datos de taquilla han sido bastante pobres y se habla de un descalabro monumental que haría perder más de 100 millones de dólares a los productores de la película.